Amados hermanos y hermanas.
En Isaías 11:3 dice lo siguiente: “Y le hará entender diligente en el temor de Jehová. No juzgará según la vista de sus ojos, ni argüirá por lo que oigan sus oídos.”
El profeta Isaías, 600 años antes de la primera venida de Jesús nos muestra el espíritu de sabiduría, de conocimiento y de consejo que Jesús en su tiempo traería a los suyos. A veces es tanta nuestra aflicción que nos llegamos a preguntar ¿Señor, donde estás tú? Y a gritos buscamos de su presencia para ser rescatados desde la oscuridad y el temor. Hacer un compromiso de amor y obediencia con Jesús es lo mejor que podemos hacer, es lo mejor que nos puede ocurrir. Dice que Él no juzgará con ojos, sino que nos hará entender el temor de Jehová, para ayudarnos a tener una vida plena y en seguridad ante cualquier circunstancia. Hará equidad y justicia a los pobres y mansos de la tierra. Nuestra confianza descansa en Él, nuestro Rey y salvador.
Dios te bendiga en este día.
Toma un tiempo para orar.
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