Amados hermanos.
En 1 Corintios 6:19-20 dice lo siguiente: “¿Acaso no saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo, quien está en ustedes y al que han recibido de parte de Dios? Ustedes no son sus propios dueños; 20 fueron comprados por un precio. Por tanto, honren con su cuerpo a Dios. (NVI)
De acuerdo a las tradiciones bíblicas e históricas, se nos enseñó que Dios habitaba en su templo hecho por manos de hombres. Desde que Cristo murió y resucito, ya no tenemos templos materiales. Dios habita ahora en nuestros corazones. El templo del Espíritu de Dios ahora es el cuerpo del creyente. Si el Espíritu de Dios vive en nosotros, demás está decir que debemos mantener ese cuerpo de modo que sea digno templo de Dios. Cuando recibimos visita en nuestra casa, limpiamos lo mejor posible, ponemos todo en orden. ¿Hemos de hacer menos cuando sabemos que el visitante es el Espíritu Santo de Dios? Esto nos lleva a considerar cuidadosamente lo que hacemos con nuestro cuerpo que ya no es nuestro. Es de Dios. Por tal razón debemos mantenerlo limpio, adornado con virtudes y sanas costumbres.
Dios te bendiga en este día.
Toma un tiempo para orar.
Leave a Reply